ALPHABEAT- Alphabeat
Todo un hit de primeros de año que conseguimos via Skivhugget.se justo antes de dejar de ser independientes y fichar por una multinacional inglesa y ser nominados para los MTV awards. Aunque aún no han alcanzado el estrellato que se merecen siguen siendo la gente más cool y más divertida de 2007. Su disco homonimísimo recoge todo lo sembrado por Madonna en los 80, y pasa por sonar como La Casa azul meets The Ark-hanky-panky style. Grandes temas como Boyfriend, 10,000 nights of thunder, The Jungle u Ocean blue son como petardos pop de colorines que no podrían ir mejor conjuntados con este artwork que llevan que nos lleva de vuelta al cásico happy schlager nórdico y que deja el aspecto de las colecciones de H&M a la altura de Prada. EN todo sentido, el disco de Alphabeat es casi redondo y tan solo cojea en dos o tres canciones (ie. Rubber Boots/McKintosh) pero mantiene el ritmo sorprendiendo con melodías sólidas en cada corte. Y mira, tiene una pista oculta en la que suena el piano.
A estas alturas ya nadie se sorprende de que se diga que BWO son el grupo de powerpop más grande que ha salido de Suecia (dejando de lado a The Sounds)como en su día lo fueron ABBA o Ace of Base. Fabricator sube el listón de su último disco y consigue que cada single del disco pueda ser single. Los beats propios de PSB, la pose de Kraftwerk y el desenfado de Army of Lovers siguen siendo las marcas de la casa. Si tuviera que elegir entre todas las pistas, me quedaría sin duda con "Give me the night" o incluso con "We should be dancing" por lo über-electrónico de sus arreglos y por sus melodías y sobre todo-todo-todo por sus estribillos matadores que son como pequeñas explosiones de actitud en medio de un pentagrama. Jean Pierre Barda es Dios. Vi absolut menar det.
Vive la Fête- Jour de chance
VlF es el grupo más trendsetter de lo que queda de Bélgica, una vez que Hooverphonic y KS Choice son historia. Son flamencos pero cantan en francés y viven en una granja donde debe habitar el fantasma de Serge Gainsbourg. Els Pinoo, su cantante, es como Neo-Jane Birkin, en look y en actitud y este último disco es mucho más accesible que por ejemplo "Grand prix". No experimenta tanto con sonidos y melodías imposibles pero toma toda una euroherencia musical de órdago. "Les aventures fictives" sorprende como melodía de teleserie de policías setentera, "Love me, please love me" es una balada clásica a piano con sonido dancehall, "Stupid Femme" es una mezcla Nu-metal/New Wave que parace sacada de su anterior disco, "La Route" es pura melancolía, "Je suis fachée avec toi" es más Neue Deutsche Welle, que es lo que tiene ser del Benelux, que facilmente toma uno de aquí y allá. Y sin embargo, algunas canciones son algo prescindibles, lo cual deja a "Jour de chance" lejos de lo máximo, pero sí que es algo que ha marcado de alguna manera mi año. Pena de no haber ido a su concierto en Madrid hace unas semanas. Mais ces´t la vie.
Miranda- El Disco de tu corazón
Y este es sin duda, uno de los discos más redondos que he escuchado en un porrón de tiempo. "Don" no me emocionó nunca demasiado, pero con "EDDTC", los argentos más totales han dado una vuelta de tuerca al electro-pop de mitades de los 80 sin ningún complejo pop en absoluto. En ocasiones suenan a Ace of Base (Perfecta) con sus bases reggae, otras veces recuerdan a ABBA, como en la fabulosa "Hasta hoy" que tiene una melodía tan azucarada como efectiva, a veces son Fangoria (el single "Prisionero"), y otras veces las comparaciones se quedan cortas, como en el caso de "Déjame", que desde los primeros bits debes dejarte arrastrar por esos arreglos tan burbujeantes y esa melodía tan bien construída que engancha desde el comienzo hasta ese final tan como de fuegos artificiales. En definitiva es un disco para escuchar de cabo a rabo sin dejarse nada fuera. Con el permiso de Guille Milkyway, el mejor disco en español de la época.
Robyn- Robyn-UK Edition
Robyn ha sido, al menos para mí, la heroína del año. Ha hecho la maleta metiendo sólidos singles de pop ya conocios en Suecia y se ha ido a Londres a competir con rockbands de pub y afroamericanas moviendo el pandero, consiguiendo el UNO más celebrado en Spray este año. Y de este disco sí se puede dcir que es perfectamente redondo. Ni falta ni sobra nada. El artwork compartido con sus tres singles-to-date inspirado en Eiseberg es brillante, como lo son sus arreglos post-Max Martin, la madurez oculta de las letras y las melodías, disfrazadas de un pop adolescente imposible. En cierto modo, "Handle me", "Who´s that girl" o "Be mine" son pura resistencia a aceptar que la vida puede ser dura. "Konichiwa Bitches" es un puente que tiende hacia el r´n´b que ella casa como nadie con el electro y con el scandi-pop. Realmente si ha habido este año un disco que metería en un búnker y los dejaría para una postguerra nuclear, sería este.
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