Watchmen...

Decía Almodóvar que Penélope había conseguido su Oscar sin las apoyaduras dramáticas necesarias en la película de Allen, esa palabra resulta horrible pero en cierto modo venía a decir una realidad sobre la que muchos están de acuerdo. Este fin de semana se ha estrenado Watchmen, finalmente las críticas están resultando frías aunque todos están más o menos de acuerdo en resaltar el esmero visual de Zack Snyder, pues bien usando la misma terminología del director español habría que decir que Snyder no cuenta con las armas necesarias para ir más allá del efectismo en esta obra por momentos demasiado larga.

Memorables son los títulos de crédito en donde se nos traslada con acierto a esa realidad inexistente y pasada en donde transcurre la acción, tampoco están mal algunos retratos de los personajes y pese a abusar del mecanismo en algunas ocasiones, el juego de los flashback funciona razonablemente bien. Sin embargo la historia se pierde después de los primeros 40mn y la complejidad de la obra resulta fallida en la pantalla, todo se convierte en demasiado superficial para la pretendidad profundidad de la trama. Yo no era fan de estos comics pero si que salí del cine con una sensación de que todo daba para más, ni pasará a la historia como la mejor película de superhéroes ni recaudará más que la última de Batman, es hasta probable que la acabemos olvidando. 5/10